Todas sabemos que un embarazo son 40 semanas de amenorrea, así que ¡enhorabuena, ya estás a mitad del embarazo y tu bebé está ya bien grande! Es tan largo como un plátano. Mide sobre 25 centímetros, pero eso no significa que en la última semana haya crecido 10 centímetros, lo que sucede es que ahora se mide desde la cabeza hasta los dedos de los pies. En las anteriores semanas se medía desde su cabeza hasta el culete, porque antes tenía las piernas muy pegadas al cuerpo y era difícil medirlo desde la cabeza a los pies.
Tu bebé está ahora recubierto de una sustancia blanca y un poco grasa que se llama «vernix caseosa». Esta sustancia protege su piel mientras esté flotando en el líquido amniótico. Además, ayuda a que el bebé pase con más facilidad por el canal vaginal durante el nacimiento. Ahora traga más líquido amniótico cada día, y eso es muy bueno para su sistema digestivo porque tragar le ayuda a practicar para cuando coma de verdad. En estas semanas también está produciendo en su pancita una sustancia que se llama meconio. El meconio es negro, o verde muy oscuro, es muy pegajoso y está hecho de todas las células muertas, secreciones del estómago y líquido amniótico que el bebé traga. El meconio se acumula en los intestinos y aparecerá en el primer pañal que tengas que cambiar.
Imagen: eladerezo