Las alergias alimentarias son reacciones adversas a un alimento o respuesta clínica a la ingestión de un alimento o un aditivo alimentario, tales como toxinas, cafeína, contaminantes químicos o microbiano. La digestión incompleta de los alimentos y la inmadurez de la mucosa gastrointestinal hace al joven lactante particularmente vulnerable al desarrollo de hipersensibilidad.
¿Qué podemos hacer para prevenir que nuestro bebé tenga alergia alimentaria?
- La prevención ideal es la lactancia materna exclusiva durante los 6 primeros meses de vida, excluyendo (leche de vaca).
- Eliminar o reducir alimentos potencialmente alergénicos ingeridos por la embarazada en el último trimestre de la gestación y primeros meses de lactancia, especialmente leche de vaca, huevos y mariscos.
- Promover la lactancia natural, que juega un doble papel beneficioso al eliminar algunas proteínas alergénicas y aportar importantes factores inmunes defensivos.
- La utilización de fórmulas especiales y agentes farmacológicos cuando la enfermedad alérgica está presente.
¿Qué tipo de alimentos pueden dar alergias a nuestro bebé?
- La alergia a la leche de vaca
- Los siguientes alimentos: el chocolate, huevos, tomate, naranja, maíz, queso, trigo, pepino, cacahuete, nuez, pescado y café.
- Intolerancia a la lactosa que es el principal hidrato de carbono de la leche.
Síntomas
- Vómitos y/o diarrea, que puede implicar, además, malabsorción intestinal o retraso de crecimiento.
- Anemia e hipoproteínemia.
- Reflujo gastroesofágico
- Dolor abdominal postprandial (llanto o irritabilidad)
- Náuseas