Siempre se ha dicho que la piel humana tiene memoria, y que va acumulando los daños que le vamos infligiendo desde nuestra infancia. Debido a esto, es muy importante saber proteger y cuidar al máximo la piel de nuestros hijos, más aún cuando se tratan de recién nacidos. Consejos hay muchos y variados, hoy queremos mostraros algunos de los más importantes. De todas formas, recomendamos que ante la aparición de cualquier alteración cutánea acudamos a algún experto. Seguro que siempre podremos acudir a consultas dermatología en Bilbao, Madrid o cualquier ciudad próxima a nuestra ubicación.
El cuidado de la piel de nuestros pequeños, lo podemos dividir en varios bloques. Empecemos con los cuidados más importantes para la piel de nuestros hijos.
Higiene de la piel del bebé
Una de las cosas más importantes para el bebé es el baño. Este se puede hacer a diario, dejando de lado los falsos mitos que aseguran que no es bueno para el pequeño. Lo que sí debemos tener muy presente son algunas cosas que pueden provocar problemas en su delicada piel. Por ejemplo, el agua siempre tiene que estar tibia, en torno a los 24 grados. También es aconsejable utilizar jabones con un pH neutro que son menos agresivos y lavar la cabeza justo antes de sacarlo de la bañera, para evitar que pierdan calor.
Una vez terminado el baño, es importante aplicar una buena crema hidratante para mejorar la barrera de la piel y la hidratación cutánea. También es importante hidratar bien las zonas más propensas a sufrir irritaciones.
Los expertos no recomiendan el uso de perfumes y colonias directamente sobre la piel del bebé por sus propiedades alergizantes. En caso de utilizarla, hacerlo sobre la ropa.
Cuidados respecto al sol y aire libre
La piel de los bebés es muy delicada, por lo que los rayos ultravioletas pueden hacer mucho daño, de ahí que sea muy importante asegurar la máxima protección para los pequeños. Para conseguirlo, durante los primeros seis meses, hay que evitar exponer a los bebés directamente al sol. Esto no quiere decir que no haya que salir de casa con ellos, pero sí hacerlo cuando el sol va perdiendo intensidad o bien que vayan protegidos con algún tipo de sombrilla o capazo.
En el caso de niños de mayor edad, lo que debemos evitar es la exposición solar en las horas que más fuerte está el sol. También se deben aplicar cremas con factor de protección alto, siempre al menos media hora antes de que se expongan al sol, renovando la aplicación periódicamente.
Ropa a utilizar
Aunque pueda parecer raro, la ropa que elijamos para los bebés también influirá en el cuidado de su piel. Ya hemos dicho que esta es muy delicada, por lo que suele presentar poca tolerancia a las fibras artificiales, productos químicos y cosas similares. Por este motivo, es muy importante que durante los primeros meses de vida optemos por utilizar ropa de algodón.
A la hora de lavar la ropa de los más pequeños, es recomendable utilizar productos de limpieza que sean aptos para este tipo de pieles. Por suerte, en el mercado nos podemos encontrar una amplia gama de estos productos.
Cuidado de los eccemas
Es habitual que los niños presenten de vez en cuando erupciones en la piel que pueden producir molestos picores. Suelen tratarse de eccemas que hacen que su piel se enrojezca y se irrite. Para evitar esta situación, lo que los expertos recomiendan es una buena hidratación y el uso de jabones para pieles atópicas. Si notamos que han aparecido eccemas, entonces habría que acudir al médico para que revisara la situación y mandase el tratamiento adecuado.
Además de estos consejos para el cuidado de la piel de los bebés, seguro que vosotros también conocéis otros interesantes consejos. Si es así, os animamos a que los compartáis con todos nosotros. ¡Os estamos esperando!