Esta es una pregunta que sólo podrás responder tú, la respuesta puede ser difícil y dependerá de diferentes factores. En cada uno de los nacimientos las familias deberán adaptarse a una nueva realidad, cambiando parte de su estilo de vida, la economía, el trabajo y las relaciones.
¿Existe un mejor momento?
Muchos profesionales tienen una idea aproximada de cuando será el mejor momento para tener un segundo hijo, pero estas opiniones deben ser tomadas como simples referencias ya que cada familia es un mundo y el momento que es adecuado para una no lo será para otra.
Los científicos intentaron encontrar una respuesta para la pregunta en cuestión y si bien no están en condiciones de afirmar de manera definitiva que el dato sea el óptimo la mayoría considera que es bueno esperar entre dos y tres años entre cada nacimiento, muchos consideran que ese tiempo es el ideal.
Ahora nos referiremos a una serie de estudios que se dedicaron a evaluar los intervalos de tiempo entre cada hijo.
En el caso de que la distancia sea menor a los 18 meses o más de 5 años podrá existir la posibilidad de tener un parto prematuro o con un peso inferior al de la edad gestacional. Al tener períodos de tiempo corto el problema sería que el organismo de la mujer no tendría el tiempo necesario para recuperarse, en el caso de los intervalos muy largos podría suceder que la fertilidad de la mujer disminuya gradualmente, a medida va pasando el tiempo.
Puntos para tener en cuenta al buscar un segundo embarazo
Si bien en el punto anterior nos hemos referido a lo que considera la ciencia como ideal lo cierto es que existen otras razones que ayudarán a tomar la decisión. La razón nos lleva a pensar que no es lo mejor quedar embarazada si tienes un hijo de menos de seis meses (aunque algunos consideren que llevarse muy poco tiempo de diferencia permitirá que se críen juntos, volviéndose compañeros para toda la vida). Puedes evaluar ambos aspectos y sacar tus propias conclusiones.
Muchos prefieren esperar un poco más, cerca de dos años y medio, tres años ya que así se podrá pasar un tiempo exclusivo con el primero, además de garantizarte que comenzarás con los pañales cuando el hijo mayor ya los haya dejado.
Estar lista para un cambio de vida
Tu primer hijo ya ha crecido un poco y todos comenzaron a tener un estilo de vida determinado, siguiendo algunas rutinas, incluso la pareja ya tiene más tiempo para dedicarse o la madre tomo la iniciativa de regresar a su trabajo. Todos estos aspectos deberán ser considerados a la hora de planificar tener otro niño. Recordemos que un bebé recién nacido requiere de mucho tiempo y energías, además los hermanos también deberán estar listos para la llegada de un nuevo bebé.
Evalúa tu situación económica
Si bien este no debería ser un punto que tenga que influir a la hora de buscar un bebé la realidad nos indica lo contrario. Las familias deberán evaluar su situación económica antes de emprender la búsqueda de un hijo.
La cruel realidad nos indica que un niño genera gastos, necesitarán alimentos, ropa, muebles, accesorios y debemos tener un dinero que se destinará a su salud y a cualquier tipo de imprevisto que pueda aparecer.
También se deberá evaluar el tema laboral. En muchas ocasiones las mujeres pueden tener problemas de mantener su trabajo, sin importar si es de tiempo completo o media jornada, especialmente con la llegada de un tercer o segundo niño. Entonces se deberá considerar si es posible que la mujer deje de trabajar hasta que aparezca una nueva posibilidad laboral.
¿Cuál es tu edad?
Lamentablemente la edad de los padres es un punto muy importante para evaluar, especialmente en el caso de las mujeres. Si ya estás pisando los 38 años y quieres tener un segundo niño no deberás esperar muchos años más. En el caso de que la mujer sea menor a los 30 años y no tienes ningún problema de salud vinculado a la fertilidad podrás ser más flexible en este aspecto.
Es muy importante que ambos miembros de la pareja estén de acuerdo en tener un segundo o un tercer niño, esta es una decisión fundamental que no puede ser tomada de manera arbitraria por las mujeres. La pareja se tiene que sentar y analizar juntos los diferentes aspectos que hemos evaluado en este articulo. Si bien es un tema que no resolverán en la primera charla al menos entenderán lo positivo que es dialogar y comprender la opinión del otro miembro al respecto.
Puede resultar muy importante intercambiar experiencias con otras personas que estén pasando por el mismo momento, sin caer en el error de contarle a todo el mundo ni escuchar absolutamente todas las opiniones sin pasarlas por un filtro.