Cuando el ginecólogo le corta el cordón umbilical al bebé para separarlo de la madre, deja una pequeña porción, unida al ombligo y la sujeta con una pinza de plástico. Este trocito de carne se irá secando poco a poco hasta desprenderse. Los próximos 5 o 10 días aproximados la herida irà cicatrizando hasta que finalmente se caiga.
El cordón debe lavarse con agua y jabón líquido neutro o curar con un desinfectante de clorhexidina. Te explicamos algunos detalles para que puedas lavar la herida sin ningún tipo de problema:
- La mamá, el papá o el que vaya a limpiar la herida deberá limpiarse bien las manos con agua y jabón.
- Prepara el material que vas a utilizar: un antiséptico, gasas o un bastoncillo de algodón.
- Tumba el bebé desnudo boca arriba, sobre el cambiador, echa el antiséptico en uno de los extremos del bastoncillo y sujétalo por el otro.
- Para curarle, debemos elevar la pinza que sujeta el cordón y pasaremos el bastoncillo empapado en antiséptico alrededor del ombligo y eliminamos los restos de sangre que pueda seguir.
- Si ya se le ha caído, haremos lo mismo, un movimiento circular en la base una sola vez. Si queda sangre, pasaremos otro bastoncillo
- Se recomienda dejadlo unos minutos al aire, sin pañal, para que se seque al aire, más fácilmente.
- No debemos echarle pomadas ni polvos de talco.
- La enfermera debe ser la encargada en el hospital de curarle, dile que te enseñe y vea como lo haces tú.
- Debemos cambiarle el pañal a menudo para que se infecte. Cada vez que cambiemos el pañal debemos limpiar con antiséptico el cordón.