Dominar la lactancia lleva su tiempo, sobre todo si eres madre primeriza. Aunque como todos los bebés no son iguales, si ya has sido madre antes puede que el primero no te haya dado problemas… pero el segundo es un mundo completamente diferente. El dominio de la lactancia viene con el tiempo. Al principio puedes sentirte desorientada y desubicada. Pero poco a poco le irás cogiendo práctica. Eso sí, vigila que el bebé se está alimentando bien y succionando como tiene que hacerlo. Es frecuente ver a recién nacidos, que les cueste trabajo al principio.
Es esencial tener en cuenta, para el periodo de lactancia, que la leche que con la que alimentas a tu hijo es muy especial. La leche materna da a tu bebé una serie de aportes indispensables, para el mejor desarrollo inmunológico del pequeño. De esta forma se harán más fuertes, antes las adversidades de lo que le rodea. Es el mejor alimento que una madre puede ofrecer a su hijo, a no ser que no puedas hacerlo por algún motivo.
Además algo que debes saber es que tu cuerpo se recupera mucho antes, dando el pecho a tu hijo, que si no lo haces. Es un gran beneficio tanto para tu hijo, como para ti misma. Además hay algunos estudios que parecen indicar que el dar el pecho a tu hijo, disminuye el riesgo de sufrir depresión posparto. Es cierto que si te lanzas a dar el pecho a tu hijo, durante el periodo de lactancia, también tiene algunos inconvenientes.
Pero estos inconvenientes pueden ser subsanados. Por ejemplo las grietas en los pezones, puedes curarlas con un poco de crema de caléndula. Es buena ya lo verás. De todas formas puedes consultar a tu médico para que te recete algo. Además deberás tener presente el riesgo de mastitis. Observarte, si tienes síntomas acude al médico y no lo dejes pasar.
Por otro lado, ten en cuenta durante este periodo que, todo lo que ingieras lo transmites a tu bebé a través de la leche materna. De esta forma se recomienda evitar cosas como la cafeína o el alcohol. Incluso hay productos de belleza que no son buenos durante la lactancia. Hay cosméticos o anticelulíticos, que tienen sustancia de cafeína… estos no son buenos si los utilizas de forma diaria.