Ya queda poco para comenzar el verano y serán muchos los papás que puedan disfrutar de sus vacaciones. Muchos papás estarán pensando en irse a la playa o montaña a desconectar del trabajo y de la rutina pero el posible «inconveniente» se les presenta en forma de bebé y es que si has sido padre reciéntemente, tienes que tener en cuenta muchas cosas antes de planificar un viaje ya que no todos los destinos serán posibles con él. Uno de los viajes que más pueden ajustarse a la situación son los cruceros. Allí tendréis un camarote entero para vosotros, para poder utilizarlo en el momento que precise. Además, existen cruceros con guarderías incluídas, donde pueden cuidar de vuestros hijos mientras os relajáis en la piscina.
En el barco hay otros muchos servicios para poder disfrutar tranquilamente de las vacaciones, como un pediatra que podrá examinar a tu bebé si pasara algo. El crucero, como venimos hablando, es muy recomendable ya que suelen ser económicos y os permiten visitar más de un lugar por lo que será perfecto. Otra opción es alquilar un apartamento u hotel donde poder alojaros y que esté cerquita de la playa. Allí estaréis muy a gusto, como en casa, pero desconectando de todo gracias al mar. Veréis lo divertido que es ver bañarse a vuestro bebé por primera vez. Le encantará. Elegid un destino con playas calmadas, como es el mar menor, para que podais sentaros en la orilla, sin peligro de ninguna ola.
La montaña es más complicada ya que si hay nieve, puede ser peligroso para él. Sin embargo, si te lo montas bien, siempre podrás organizar tu viaje como más te guste y barajando todas las oportunidades. Una agencia os podrá echar una mano.