El método Kassing es la forma de administrar el alimento al bebé con biberón de la manera más parecida al pecho materno. Este sistema interfiere menos con la lactancia y se utiliza cuando los biberones son algo temporal.
La OMS recomienda que los bebés reciban lactancia materna exclusiva durante los primeros seis meses de vida. Pero no siempre es posible, algunos bebés necesitan recibir suplementos, en otros casos las mamás deben reintegrarse a sus trabajos antes de que los bebés cumplan los seis meses. Por lo tanto, el método Kassing es ideal para la persona que debe darle la leche al bebé en su ausencia.
¿En qué consiste el método Kassing?
El método Kassing, denominado con ese nombre porque la creadora y defensora de este sistema fue la doctora Dee Kassing. Se basa en estimular el enganche para lograr que el biberón no sea un obstáculo para la lactancia. La técnica busca que al dar al biberón el bebé sienta la misma experiencia que si estuviera tomando directamente del pecho de su madre.
De esta forma, la madre que empieza a dar el biberón a su hijo durante los primeros días siguiendo esta técnica y puede empezar a amamantar más tarde con mucha menos dificultad.
Si comienzas a dar el biberón al recién nacido, entonces lo más probable es que el bebé no pueda adaptarse después al pecho y se negará a mamar. También puedes utilizar el método Kassing si estás apostando por la lactancia mixta.
Consejos para la práctica del método Kassing
Características del biberón
- La tetina del biberón debe ser completamente redonda. Por ejemplo, la tetina oblicua le algunos biberones no funcionan. El pezón redondo es más similar al pezón de una madre. También es conveniente que el pezón sea largo.
- La tetina del biberón debe ser de flujo lento, con la base más estrecha y blanda.
- La botella debe ser recta, nunca curvada. La idea es que para el bebé sea algo más difícil.
- Los biberones curvos hacen que la leche salga más fácilmente. Al amamantar, el bebé debe esforzarse. Es lo que se busca con la botella y con el método Kassing.
Dee Kassing estima que los bebés deberían tardar unos 20 minutos en terminar un biberón. Algunos bebés, como los bebés prematuros o los bebés con poco tono muscular, pueden necesitar una tetina de flujo medio hasta que se fortalezcan. Además, la tetina debe ser lo más suave posible (las tetinas de silicona parecen ser más suaves que el látex).
¿Cómo dar un biberón siguiendo el método Kassing?
Debes colocar al bebé incorporado, lo más vertical posible, semisentado. La persona que le da el biberón puede sujetarle la cabeza con una mano. La botella se colocará en posición horizontal. De esa manera evitamos que la leche fluya más rápido por acción de la gravedad y evitamos también atragantamientos.
Estimulamos el reflejo de búsqueda de la misma forma que lo hacemos con el pecho. Tocamos la nariz y los labios, especialmente el inferior y, cuando la boquita está abierta, introducimos la tetina por completo.
Levantamos ligeramente el biberón para que la tetina quede completamente llena de leche (y no trague aire). A medida que se acerca el final de la toma, puede ser necesario acostar un poco al bebé para mantener la tetina llena de leche.
Es conveniente hacer una pausa durante la toma y ver si el bebé está lleno o quiere seguir mamando. Con paciencia y práctica aprenderás a utilizar el biberón con el método Kassing respetando los mecanismos naturales de hambre y saciedad.
Beneficios del método Kassing
- Los bebés que toman el biberón por este método no experimentan confusión entre la tetina y el pezón.
- Sabemos que esto no siempre sucede; hay bebés que pueden realizar lactancia mixta y levantar el chupete y seguir tomando perfectamente del pecho de la madre; pero hay otros que si toman el biberón o el chupete demasiado pronto parece que se “olvidan” de amamantar.
- No sobrealimentamos. Con esta forma de dar el biberón, permitimos que los bebés regulen su ingesta. Al tener que hacer un esfuerzo para coger el biberón, minimizamos el riesgo de sobrealimentarlos.
- Los bebés regulan coordinadamente succión-deglución-respiración.
- Menos interferencia con la lactancia, ya que chupar el biberón con este método es más parecido a chupar el pecho.
Para terminar
El método Kassing es muy útil si tu bebé es prematuro, necesita suplementos, está en alimentación mixta o si lo recomienda tu pediatra. También es ideal si la madre tiene lesiones que hacen que amamantar sea demasiado doloroso.
Si el bebé requiere suplementos, los especialistas en lactancia recomiendan que se administren en biberón, siempre y cuando se utilice leche materna y no de fórmula.
Tengamos en cuenta que la lactancia materna es el mejor alimento que existe para el niño y el más económico, pero si no tenemos otra opción y no puedes amamantar todo el tiempo, darle el biberón mediante este sistema es la mejor alimentación que puede tener.
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