La duda de los padres ante el cuidado de los bebés suele ser muy normal. A veces, queremos educarlos a la perfección y no sabemos si ante tales circunstancias le estamos «malcriando». En ocasiones, el bebé se pone a llorar y los padres le cogen. El niño se acostumbra a esto y necesita los brazos de sus papás para dormirse. Si esto llegara a ser una rutina, los padres se preocuparían ya que no pueden dormir siempre a su hijo.
Los papás podemos coger a nuestro bebé cuando llora para que se calme. Sin embargo, no debemos conseguir que se duerman, que es algo que tienen que hacer solos en la cuna, para que no relacionen los brazos con el dormir y no creemos una dependencia. Los niños deben aprender a hacer cosas solos, a ir ganando autonomía poco a poco y el dormir es una de esas situaciones que deben hacer por ellos mismos. También es cierto que en aquellas circunstancias es las que el niño sólo se calma si el papá o la mama lo tiene en brazos, debemos darle ese gusto, tampoco queremos tortular a esa niño.
Si un niño se duerme solamente en brazos porque estando solo no puede conciliar el sueño debemos entender que es un bebé que necesita contacto para estar tranquilo, es más dependiente de sus padres y en contacto con ellos se siente mejor y tranquilo. Cada padre y madre debe buscar qué es lo mejor para su niño e intentar no crear vicios que puedan perjuficar en el futuro.