No tenemos que decirte que tu cuerpo va a sufrir un auténtico shock durante el parto. Si ha sido vaginal, seguramente estarás dolorida, además de físicamente agotada. Y si te han practicado una cesárea merece la pena recordarte que te estarás recuperando de una operación importante. Por lo tanto, no intentes hacerlo todo tú sola y tómate tu tiempo para recuperarte.
Prueba algunos de nuestros consejos para que puedas tener una recuperación mejor:
–Para el dolor que te pueda causar la episiotomía tómate los calmantes que te habrá recetado el médico, si no lo ha hecho, pídeselo.
–No te alarmes si pierdes orina cuando ríes, toses o estornudas. Los ejercicios de suelo pélvico pronto lo van a solucionar.
–Si te sientes estreñida procura comer mucha fibra (pan integral, pasta, arroz integral, frutas y vegetales) y beber mucha agua.
–Si sufres hemorroides, después de ir al baño prueba a limpiarte con agua caliente o con una toallita higiénica.
–Una cesárea puede hacerte creer que te vas a abrir de par en par cuando ríes, te levantas o te sientas. Procura cuidarte durante un tiempo para que cicatrice correctamente.
–A medida que tu útero se contrae, para recuperar su tamaño normal, puede que sientas dolor. El paracetamol te ayudará a aliviarlo.
–Si te duelen los pechos prueba con el truco de las hojas de col. Enfríalas en la nevera y ponlas en el sujetador. ¡Funciona!
–Y por último, pero no menos importante, notarás que sudas mucho más en la cama por la expulsión del exceso de líquido acumulado durante el embarazo. Lo mejor es dormir sobre una toalla.