Por mucho que te prepares y te informas de cara a la lactancia, esta experiencia te sorprenderá en muchos momentos. Una de las cosas que quizás no sepas es que los bebés lactantes hacen callo. Tiene forma de almohadilla y aparece justo en el centro del labio superior. No debes preocuparte por ello.
Al poco tiempo de nacer los bebés pueden presentar una pequeña ampolla justo en el centro del labio superior. Es más llamativa que dolorosa o problemática. Se trata del “callo de succión”, “ampolla labial” o “almohadilla”.
Bastante común en los bebés que empiezan a succionar, el aspecto es el de un pequeño bulto blandito, una prominencia en la piel del labio superior, que no les causa ninguna molestia y que se desprende sola en poco tiempo.
Si tu bebé tiene una ampolla de este tipo, no interrumpas la lactancia. Tampoco es necesario que vayas al pediatra. No requeire ningún tipo de tratamiento. La causa es el roce del biberón o del pecho durante la alimentación en estas primeras semanas o meses de vida del bebé.
Estas minúsculas pielecitas no deben rascarse ni arrancarse, ya que lo habitual es que a las pocas semanas, normalmente antes de los 4 meses, acaben resecándose y desapareciendo, una vez la piel del bebé se haya fortalecido y la boca se haya acostumbrado a succionar.