– Rotura de la bolsa de las aguas o aminorrexis: se denomina así a la salida de líquido amniótico. Ésta, puede ser artificial o espontánea. Recordemos que puede romperse antes del momento del parto y la cantidad de líquido expulsado es variable.
– Rubéola: es una enfermedad vírica, manifestada en forma de pequeñas manchas rosadas. Primeramente aparecen detrás de las orejas y, más tarde, por todo el cuerpo. Puede producir fiebre moderada. Es muy importante no contraerla durante el primer trimestre de gestación, pues puede producir malformaciones fetales.
– Secrección láctea: supone uno de los cambios más importantes del organismo materno durante el puerperio. En ella dominan diversas hormonas y correlaciones nerviosas, que originan la producción de leche.
– Tapón mucoso: es un tapón de consistencia gelatinosa, ubicado a la entrada del cuello uterino (canal cervical), el cual, está segregado por glándulas cervicales. Impide el paso de gérmenes de la vagina a la cavidad uterina.
– Tocólogo-Tocoginecólogo: es el médico especialista en obstetricia y ginecología.
– Tono basal: se denomina así al estado de contracción y/o tensión de la fibra uterina en reposo.
– Toxoplasmosis: es una enfermedad infecciosa producida por un protozoo parásito (Toxoplasma Gondii). El contagio se produce por consumir carnes poco hechas o por el contacto con animales. En el adulto es benigna, pudiendo pasar inadvertida. Sin embargo, durante el embarazo es muy importante la protección, pues puede originar malformaciones, partos prematuros o abortos.
– Trompa de Falopio: se llaman así a los dos pequeños órganos o canales (de 5 a 7 cm. de longitud), que se extienden desde el ovario hasta el útero. Su forma es parecida a la de una trompeta y cumplen tres funciones importantísimas: captación, acarreo y nutrición ovular.
– Tumor de parto: es un edema o hinchazón en el cuero cabelludo fetal. Se produce por la presión intrauterina sobre la cabecita del bebé. Es fisiológico y más frecuente en primíparas que el multíparas.