Gases en el embarazo

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Los gases aparecen en todas las personas por razones asociadas principalmente a la ingesta de aire durante las comidas, sin embargo en las mujeres embarazadas ocurre con mayor facilidad debido al aumento de la progesterona, que da como resultado el relajamiento de los músculos y una digestión cada vez más lenta. También pueden producirse ardores estomacales e indigestión.  Asimismo, la  no digestión de alimentos como las proteínas y grasas provoca que sean descompuestos por las bacterias presentes en el intestino grueso dando lugar a las flatulencias.

El organismo no es el mismo en todas las mujeres, por eso mientras en algunas gestantes el desencadenante de los gases estará en la leche por la intolerancia a la lactosa, en otras podría encontrarse en las pastas u otros alimentos. Esta desagradable sensación necesita ser tratada con ciertos cuidados. Inicialmente, reconoce cual es el alimento que te provoca los gases poniendo tu atención en los almidones, legumbres, coliflor o el brócoli. También es posible que los produzcan las cebollas, avena, bebidas gaseosas y en las frutas.

 Otros consejos que podemos dar a la mujer embarazada para evitar los gases son:

  • En lugar de ingerir comidas muy abundantes, haz varias comidas pequeñas a lo largo del día.
  •  Come despacio y mastica bien la comida. No hables mientras comes para no tragar tanto aire.
  •  Limita la cantidad de líquido que bebes durante las comidas. Puedes compensarla durante el resto del día.
  • Evita las bebidas con gas.
  • Ponte recta mientras comes o bebes, aunque sólo tomes un pequeño refrigerio.
  •  Usa ropa holgada y cómoda, y evita que te apriete en la cintura y barriga.
  • No mastiques chicle ni comas caramelos duros.
  •  Evita cualquier cosa endulzada con sorbitol, un edulcorante artificial.
  • Haz ejercicio, incluso una caminata a paso ligero puede ayudar a agilizar la digestión.
  • Evita el estreñimiento, ya que puede contribuir a la flatulencia y la sensación de hinchazón abdominal.
  •  No fumes, el tabaco, además de contribuir a una gran cantidad de problemas graves de salud, estimula la acidez estomacal. Lo ideal es abandonar el hábito antes de quedar embarazada.

 En caso de que estas medidas no te ayuden, pregúntale a tu médico si puedes tomar un medicamento para los gases.

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