Alrededor de uno de cada 700 bebés nacen con los labios o el paladar fisurados, y aunque por el aspecto pueda parecer grave, el tratamiento suele ser muy efectivo Esta malformación puede desfigurar el rostro, pero la mayoría de niños pueden someterse con éxito a cirugía correctiva. El tratamiento por efectos asociados, que puede incluir problemas de oído, habla o dentición, también muy exitoso.
DIFERENTES ASPECTOS:
1. Cómo se desarrolla: Las fisuras, que son huecos en el labio, encías y/o el paladar de la boca, se comienzan a formar en tu bebé cuando estás embarazada de sólo seis semanas. Es justo cuando las partes que forman la cara y el paladar se juntan, pero en un pequeño número de bebés este proceso no se realiza correctamente.
2. Qué lo causa: Aunque no se conocen todavía las causas exactas, suelen darse en una misma familia. Tomar altas dosis de suplementos de ácido fálico a diario, antes y durante el embarazo puede ayudar, según algunos médicos, especialmente si existe un historial familiar al respecto, pero se requiere siempre supervisión médica.
3. Diagnóstico: Las ecografías y escáneres hacia las 18 semanas permiten detectar el 50% de los labios fisurados, pero es más raro conseguir detectar un paladar cleft. A los padres se les recomienda recibir consejo para hablar sobre las implicaciones que conlleva.
4. Alimentar a tu bebé: Los bebés con un labio cleft no suelen tener demasiados problemas, pero si también tiene afectado el paladar puede tener dificultades para succionar correctamente, por lo que necesitarás ayuda y consejo de un médico. Probablemente no podrás darle el pecho, por eso muchas mamás se sacan leche y se la dan en biberón.
5. Tratamiento: Un labio cleft suele repararse en los primeros tres meses de vida del bebé, mientras que el paladar se suele operar cuando el bebé tiene entre seis y nueve meses. La cirugía y el tratamiento son muy efectivos pero siempre existen algunas secuelas, como una nariz de forma irregular, por ejemplo.
6. Problemas relacionados: Los labios y paladares cleft pueden acarrear varios problemas adicionales, incluyendo glue ear, problemas de habla y mal crecimiento de los dientes. Algunos niños necesitarán tratamiento adicional o la ayuda de logopedas, estomatólogos y otorrinolaringólogos.