En aquellos casos, en que las mamás ya han tenido dos partos por cesárea, puede ocurrir que cuando tengan las contracciones del tercer parto se pueda provocar la rotura de las cicatrices que dejaron las cesáreas anteriores. Pero esto depende del tiempo que ha transcurrido entre una cesárea y otra, la forma como fueron realizadas, y las condiciones generales de los embarazos anteriores.
Para evitarlo, en estos casos se suele programar una tercera cesárea de forma casi sistemática. En general, se dice que tres es el número máximo de cesárea que se pueden practicar, pero no es del todo cierto, ya que cabe la posibilidad de realizar más: depende de la técnica empleada en las anteriores y de si existieron complicaciones o no es los postoperatorios, como está transcurriendo el embarazo actual y de las condiciones generales de todo tu organismo, de cuántos años tengas… cada caso es diferente y varios aspectos que sin duda tu ginecólogo tomará en cuenta.