Durante el embarazo debemos soportar los cambios corporales de temperatura. Además, si añadimos el calor del verano, nuestros malestares se agravan. En bebés y embarazos nos preocupamos por ti y queremos que pases un buen verano. Por ello, vamos a darte algunos consejos para que puedas aliviar estos calores.
- Opta por prendas muy ligeras y que no se te peguen a la piel. Además, debes evitar los colores oscuros como el negro que tanto calor dan en esta época del año. Los zapatos también deben ser veraniegos, tipo sandalias, y cómodos.
- Los accesorios como gorra o sombrero son muy recomendables para el verano ya que previenen los rayos de sol.
- La alimentación debe cambiarse respecto a la de invierno. Debe ser fresca, deliciosa, fresca e ideal para las altas temperaturas. Las sopas, cremas y purés los guardamos hasta la llegada del frío. Abrimos paso a las ensaladillas, las ensaladas y demás recetas frescas. Se aconseja tomar muchas piezas de frutas que, además nos refrescarán como la sandía y el melón.
- Es muy bueno practicar algo de deporte con el fresco mañanero. Por ejemplo, date un paseíto todos los días a primera hora de la mañana o practica otros deportes como la natación. Así, te refrescarás y gozarás de una mejor salud.
- No debemos olvidarnos de la higiene. Dos duchas al día serán muy beneficiosas y te refrescarán. Una por la mañana y otra por la noche, antes de dormir.
- En el embarazo solemos tener las piernas cansadas. Si a esto le añadimos el calor, empeora. Además debes mantener las piernas en alto siempre que puedas. También puedes utilizar productos cosméticos específicos, como los geles y los bálsamos para piernas cansadas.