La Organización Mundial de la Salud recomienda amamantar a los bebés al menos durante seis meses. A continuación te ofrecemos algunas pautas para conseguir que tu leche sea buena y abundante:
1. Bebe cada mañana: un zumo de frutas recién hecho, así conseguirás reforzar tu dosis diaria de vitamina.
2. Come tentempiés a lo largo del día, en lugar de galletas que contienen calorías vacías, toma fruta o recurre a las barritas de cereales sin aditivos, los frutos secos o semillas.
3. Come siempre que tengas hambre: ¡aunque ello signifique comer diez veces al día! Es bueno optar por raciones pequeñas y frecuentes.
4. Apuesta por los alimentos ricos en ácidos grasos esenciales, como las pipas de girasol, los pescados azules o los huevos: son vitales para estimular el desarrollo del cerebro y el sistema inmunitario de tu bebé.
5. Bebe mucha agua mineral. Tu organismo necesita aumentar la ingesta de agua para producir más leche. Procura beber dos litros al día.