Es habitual hablar de los cambios físicos que se producen durante el embarazo. Sin embargo también es importante tener en cuenta los cambios psicológicos. El estado de ánimo se vuelve muy variable y en ocasiones podemos tener la sensación de encontrarnos un tanto deprimidas. Pero, ¿cómo saber si tan sólo es un estado pasajero o si, por el contrario, estamos realmente pasando por una depresión?
Hay una serie de indicios que nos indican cuando nos encontramos atravesando una depresión:
- Problemas de concentranción.
- Ansiedad extrema.
- Irritabilidad.
- Insomnio o problemas para conciliar el sueño.
- Fatiga.
- Cambios en el apetito, ya sea a un consumo mayor de alimentos como a la pérdida de apetito.
- Pérdida de interés por actividades que anteriormente nos hacían disfrutar.
- Cambios de humor exagerados.
- Sensación de tristeza constante.
- Experimentar pensamientos relacionados con hacerse daño a una misma o incluso a otras personas.
En caso de que consideres que problablemente estás pasando por una depresión, lo primero que debes hacer es compartirlo con las personas más cercanas: tu pareja, amigos o familiares siempre son una grandísima ayuda.
Además, es importante acudir al médico y obtener la opinión de un profesional. De esta forma nos recomendará medicación necesaria o terapias que nos ayudarán a superar la depresión con éxito.
Podéis leer mucho más sobre la depresión en embarazadas en Embarazo 10.