• La edad de la embarazada no es determinante en este primer trimestre. Una vez que se produce la gestación, no hay diferencias con las más jóvenes. En las madres añosas (las primerizas de treinta y cinco años o más), las precauciones comienzan a partir del segundo trimestre por problemas asociados a la diabetes o la hipertensión.
• No es necesario un tratamiento psicológico. Sólo es necesario si la persona comienza su embarazo con una psicología patológica de base como una crisis de pánico o de angustia. Sólo en esos casos, el embarazo puede exacerbar esos síntomas.
• Durante los primeros meses no es necesario hacer cambios en los hábitos sexuales. Las relaciones pueden mantenerse con la frecuencia y los modos habituales.
• El ácido fólico es una vitamina B que ayuda a prevenir los defectos congénitos relacionados con el cerebro y la médula espinal (llamados defectos del tubo neural). Puede colaborar en la prevención de estos defectos sólo si se toma antes de la concepción y durante la primera etapa del embarazo. Estudios recientes determinan que también contribuye a prevenir otros defectos congénitos, como lado leporino, paladar hendido y ciertos defectos cardíacos.
• La ecografía transvaginal es el método para examinar los órganos reproductores de una mujer, incluyendo el útero, los ovarios, el cuello uterino y la vagina.
• En el primer trimestre no se dan vacunas.
• Hoy en día, los equipos de rayos trabajan con unos aceleradores lineales y por eso el grado de exposición en el embarazo es mínimo. Una placa no produce nada negativo durante un embarazo. De todas formas, si se puede obviar, lo ideal es evitarla.