Continuamos con nuestro glosario:
• FIEBRE: Es una forma de reaccionar el organismo frente a una enfermedad. La temperatura normal de un niño sano es en el entorno de los 37 grados, la temperatura anal es medio grado más alta que la axial. La temperatura alta no es en sí un signo de gravedad, hay niños que en estado grave apenas hacen unas décimas de temperatura y otros que con una simple enfermedad presentan fiebre muy alta.
La mayoría de las veces la fiebre es síntoma de un proceso infeccioso, pero a veces es un síntoma de exceso de calor y deshidratación. Cuando el niño tiene fiebre, hay que quitarle la ropa y darle un baño tibio y observar su estado general. Si la temperatura se acompaña con decaimiento, sueño y falta de apetito deberá concurrir al pediatra.
• FIEBRE REUMÁTICA: Infección crónica iniciada por un germen llamado estreptococo. Comienza con amigdalitis, luego afecta las articulaciones.
• FIEBRE TIFOIDEA: Enfermedad infecciosa causada por la Salmonella typhi y que da lugar a fiebre elevada, diarrea, malestar general, erupción cutánea, etc.
• FIMOSIS: Estrechez del prepucio (piel que recubre el glande del pene) que impide descubrir el glande. En los niños pequeños esto a veces es causa de infecciones urinarias.
• FLATULENCIA: Acumulación de gases en el intestino o en el estómago. En los niños pequeños puede deberse a la ingesta de legumbres. Se alivia con masajes abdominales.