Los padres y los cuidadores tienen que guiar a los niños para desarrollar hábitos saludables en la alimentación a temprana edad. De esa manera se van a prevenir muchas enfermedades y podrán obtener todos los nutrientes para desarrollarse correctamente. También, realizar todas las actividades con la energía necesaria y tener buena calidad de vida.
Seguramente no vamos a tener todas las respuestas, pero es muy importante informarse para poder enseñarles, adquirir esos hábitos saludables y darles el ejemplo. Parte de ello incluye asegurarte de que sigan una dieta sana que contribuya a su salud general y favorezca su crecimiento y desarrollo.
Sin embargo, con tantos alimentos poco saludables y mensajes de marketing aparentemente interminables que promueven opciones poco saludables para los niños, puede ser difícil guiarles hacia opciones más sanas.
Por eso es importante que los padres fomenten y promuevan hábitos saludables alimentarios. En este artículo, exploraremos algunas formas sencillas y prácticas de animar a los niños a comer alimentos nutritivos.
Consejos para promover hábitos saludables en la alimentación de los chicos
Da un ejemplo positivo
Los niños miran a sus padres en busca de orientación y dirección, y la mejor manera de hacerlo es brindar el ejemplo. Si quieres que tus hijos coman sano, asegúrate de que te vean seguir una dieta equilibrada y enseña los hábitos saludables para obtener calidad de vida.
De este modo, estarás fomentando el estilo de vida sano que quieres para tu hijo. Intenta incluir en tu dieta frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y productos lácteos bajos en grasa, y recuerda evitar los alimentos procesados y las bebidas azucaradas. Esto no sólo será un buen ejemplo para tu hijo, sino que también mejorará tu propia salud.
Hazlo divertido
Es más probable que los niños coman algo si han participado en el proceso. Haz que participen en la planificación, la compra y la preparación de las comidas. Cuando participan en la toma de decisiones y en la preparación, se sienten más implicados y es más probable que disfruten y se sientan motivados para hacerlo bien, entendiendo todo el proceso.
Considera la posibilidad de planificar comidas temáticas en torno a distintos países o celebraciones, o de hacer frutas y verduras con formas divertidas. Esto ayudará a los niños a ver los alimentos saludables de forma positiva y a asociarlos con buenos momentos y grandes recuerdos.
Fomenta la variedad dentro de los hábitos saludables de alimentación
Es importante ayudar a los niños a entender que las comidas no tienen por qué incluir siempre los mismos alimentos. Enséñales la importancia de comer alimentos variados para obtener todos los nutrientes esenciales. Cuando las comidas incluyen productos de distintos colores o cereales y legumbres de distintas cocinas, puedes apostar a que están obteniendo una amplia gama de vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales.
Para asegurarte de que el niño recibe todos los nutrientes necesarios, también es una buena idea incluir un multivitamínico en su dieta. Asegúrate de hablar con el pediatra de tu hijo antes de añadir cualquier suplemento.
No te rindas al querer enseñar hábitos saludables
Puede ser una pequeña batalla conseguir que los niños coman algo nuevo o que sea bueno para ellos. En lugar de frustrarte, sigue intentándolo. A veces hacen falta varios intentos para introducir un nuevo alimento antes de que lo acepte. Sigue ofreciéndole el nuevo alimento y asegúrate de ser paciente y de elogiar mucho el esfuerzo.
Limita los caprichos
Aunque está bien dejar que los niños disfruten de algunos caprichos ocasionales, es esencial no permitir que estos alimentos poco saludables se conviertan en parte habitual de su dieta.
Intenta mantener los tentempiés poco saludables fuera de casa y, en su lugar, abastécete de una variedad de opciones saludables. Ofreciendo tentempiés nutritivos, los niños se acostumbrarán a disfrutar de opciones más sanas. Aunque, puedes dar permiso para algún dulce en alguna ocasión especial.
Monitorea el tamaño de las porciones
Es importante vigilar de cerca el tamaño de las comidas y los tentempiés. Enseñar a los niños a escuchar sus señales de hambre y a dejar de comer cuando están saciados les ayudará a evitar comer en exceso.
Un truco sencillo para ayudar a los niños a comer raciones más pequeñas es servirles porciones más pequeñas, y dejarlos que pidan una segunda ración si siguen teniendo hambre.
Pensamientos finales…
Animar a los niños a seguir una dieta sana y equilibrada puede ser todo un reto, pero el esfuerzo merece la pena. Tomar algunas medidas sencillas puede ayudar a fomentar el desarrollo de hábitos saludables en cuanto a alimentación y buena calidad de vida, que les encaminen hacia la salud y el bienestar para toda la vida.
Da buen ejemplo, haz que comer sano sea divertido, fomenta la variedad y controla las raciones para garantizar un buen comienzo a tus hijos.
Recordemos que la base de una buena salud es una dieta equilibrada, compuesta de todos los nutrientes que el cuerpo necesita para desarrollarse correctamente; y la práctica de ejercicios físicos, para bajar los niveles de estrés, mantener nuestros músculos activos, fortalecer los huesos y el sistema circulatorio. Si comprenden lo bueno de seguir esos hábitos saludables estarán transitando el camino de la salud total y la buena calidad de vida.
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