En los niños en fase de crecimiento, los huesos pueden presentarse desalineados. Tales problemas incluyen escoliosis, por la cual la columna vertebral se encorva anormalmente.
¿CÓMO PUEDE MANIFESTARSE?
Muchas veces es un defecto de nacimiento. Cuando se desarrolla, en el 75% de los casos no se encuentra ninguna causa aparente; el resto es causado por la poliomielitis, la parálisis cerebral, la osteoporosis juvenil u otras enfermedades.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?
Puede sentirse fatiga en la espalda, cuando se ha permanecido sentado o de pie durante un período de tiempo prolongado, seguida de un dolor muscular localizado y, finalmente es un dolor más fuerte.
¿HAY ALGUNA MANERA DE DETECTARLO?
Las curvas, en su mayoría, son convexas hacia la derecha en la parte superior de la espalda y hacia la izquierda en la parte inferior, por lo tanto, el hombro derecho es más alto que el izquierdo y una cadera puede estar más arriba que la otra. La escoliosis leve puede descubrirse en una exploración médica de rutina. Los padres o un maestro podrían sospechar si el niño tiene los hombros desalineados o cuando la ropa le cuelga de un solo lado.
¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO MÁS EFECTIVO?
Depende de la gravedad del problema. Un buen pronóstico debe explicitar el lugar en donde se encuentra la curva anormal y la severidad de la misma. Un niño que tiene escoliosis es tratado por un especialista ortopédico, que generalmente utiliza el método denominado él Ángulo de Cobb, que mide el grado de la curvatura de la columna.
Entre casi un 20 a 25% de los niños con escoliosis deben usar un corsé ortopédico, que ayuda a que la columna generalmente no sufra más desviaciones, pero el corsé ortopédico NO endereza la columna. Existen varios tipos de corsés. Y generalmente los niños los deben usar durante aproximadamente entre 18 a 20 horas diarias. Depende de la gravedad del problema.