Al principio te parecerá complicado, pero te harás una experta enseguida.
PASO A PASO LA EXTRACCIÓN DE LA LECHE MATERNA:
1. Busca un lugar limpio en el que te encuentres tranquila y lávate las manos. No hace falta lavarte el pecho, a no ser que el bebé acabe de mamar; en ese caso, retira su saliva.
2. Para estimular la salida de la leche, masajea la mama en dirección al pezón. Si estás en el trabajo, te ayudará mirar una foto de tu hijo. Un truco para casa: aprovecha mientras tu hijo mama para sacarte leche del otro pecho; así te beneficias del reflejo de eyección y logras más cantidad con menos esfuerzo.
3. No te agobies si al principio no sale mucha leche: necesitas entrenamiento, y la cantidad que consigas con el extractor no es indicativa del volumen que produces.
4. Al acabar, lava bien el extractor para que no queden restos de leche.
5. Puedes conservar la leche materna en el frigorífico hasta cinco días. Si estás en el trabajo, deberás guardarla y transportarla hasta casa en frío.
6. Para congelarla, usa tarros o bolsas específicos y féchalos. Puede estar congelada hasta 6 meses en aparatos combi, 3 o 4 meses en congeladores con puerta separada de la nevera, o 2 semana en los que están dentro de ellas.
7. Notarás que la congelada toma un aspecto acuoso, con una capa más densa arriba. No es que se haya descompuesto; una vez descongelada, agítala para uniformizarla.
8. Para descongelar la leche, pon el recipiente dentro de otro con agua caliente o bajo un chorro de agua templada. Una vez descongelada, se debe consumir en 24 horas.
9. La leche materna se puede calentar al baño María, con un calientabiberones o con el microondas, a potencia media, aunque esta opción es la menos recomendable.