Uno de los primeros síntomas del embarazo es que necesitarás ir al baño continuamente, tanto por el día como por la noche. Y luego te darás cuenta que realmente no tenías tanta necesidad de orinar. Todo tiene una explicación. Sigue leyendo y lo comprobarás.
¿Por qué tienes permanentemente esa sensación de peso en el vientre?
El útero que cada vez es más grande ejerce durante el embarazo presión sobre la vejiga, sobre todo en los primeros meses y también en el último trimestre, sobre todo, cuando empieza a descender la barriga (durante las cuatro últimas semanas antes del parto).
La mayor producción de progesterona relaja el esfínter, la vejiga (el anillo que cierra), de forma que sin querer, al toser, reír, correr o hacer algún esfuerzo, se puede perder algo de orina. Es normal tener que orinar más a menudo durante el embarazo. La zona de la pelvis tiene mejor circulación, aumenta la actividad de los riñones, produciendo más orina a la vez que el espacio de la vejiga se va haciendo menor a medida que el feto crece y la comprime más.
En las mujeres embarazadas se dan con relativa frecuencia infecciones urinarias, éstas se producen cuando las bacterias de tu piel, vagina o recto ascienden por la uretra y siguen hacia arriba; muchas de estas bacterias se paran en la vejiga donde encuentran un medio bueno para reproducirse cuya consecuencia es una inflamación llamada cistitis. Pero esas bacterias pueden seguir ascendiendo ya que los uréteres que se comunican con el riñón están “relajados” también y así pueden entrar esos gérmenes o bacterias desde la vejiga al riñón con la consiguiente infección renal.
Por eso es importante que bebas suficiente agua, aunque tengas una presión constante en la vejiga, para evitar una infección. Dado que las infecciones de vejiga a menudo son causadas por bacterias del intestino, es importante, después de ir al baño limpiarte siempre de adelante hacia atrás. En caso de ardor fuerte o dolor al orinar, sangre en la orina, fiebre o también dolor de espalda y de estómago deberías acudir urgentemente a tu médico, puesto que una infección de las vías urinarias puede provocar contracciones anticipadas. En caso de infección de orina no deberías tomar medicamentos que ingerías en situaciones similares antes del embarazo. Tienes que hablar antes con tu médico.
Tu matrona te puede enseñar también ejercicios para el suelo pélvico para fortalecer la musculatura . Estos ejercicios también te los enseñarán en los cursos de preparación al parto y en cursos de gimnasia para embarazadas.