El embarazo trae importantes cambios hormonales que alteran todos los aspectos de la vida de la mujer. Uno de los desequilibrios típicos, es sufrir náuseas, las cuales pueden ser sólo matinales o diarias. Esto hace que la persona se vea imposibilitada de cumplir con sus obligaciones cotidianas, viéndose obligada, muchas veces, a cambiar la rutina.
Si bien puede existir un estado de vulnerabilidad o sensibilidad mayor, esto no impide que se pueda incorporar la práctica constante de Reiki durante los nueve meses. Este tratamiento no posee contraindicaciones, ya que trabaja con la energía de la naturaleza, la cual, con su infinita sabiduría, propicia a que el bebé llegue al mundo exactamente cuando debe ser, y sin atrasarse ni adelantarse a la fecha de parto.
¿POR QUE ES TAN ACONSEJADO?
• Este tratamiento es muy recomendado, puesto que es una herramienta segura y sin contraindicaciones que permite controlar ciertos estados que producen molestias físicas.
• Siempre se aconseja practicar las posturas del Reiki, con los ojos cerrados, ya que ayuda, no sólo a lograr una mayor concentración, sino, además, permite una conexión más íntima con el mundo interior y con el bebé.
• Estos ejercicios son ideales para practicarlos en pareja, porque generan un clima de mayor intimidad entre ambos miembros, ayudan a compartir, y a que el bebé sienta todo el amor de sus padres antes de nacer.
• Mejora la autoestima de la madre y le brinda un caudal de energía para que pueda “almacenar” y utilizar, una vez finalizado el embarazo.
• Se puede practicar hasta el último mes de embarazo, en forma diaria. Inclusive, genera una fortaleza interna muy grande, para poder tener un parto tranquilo y sin sobresaltos.