Los niños hiperactivos, aún siendo propios, exigen mucha paciencia, amor y inteligencia, y nunca gritos, pues a un niño de tales características le exaltan mucho más. La relación y la convivencia con ellos a veces no es fácil, pero si logran alcanzar un punto de encuentro genuino entre los padres y el niños, de quietud y comprensión, sin duda que la relación se verá muy fortalecida. Muchos padres se ven sobrepasados por las situaciónes que muchas veces se generan con los niños hiperactivos, y sienten que son incapaces de poderlos manejar y se ven sobrepasados. Pero hay que esperar, con ánimo estable, pero esperar, hay que tener mucha psicología, informarse bien con un profesional, y sin duda que el crecimiento y desarrollo de los niños ayudará.
Silvia Martínez
Educadora social, fotógrafa y amante de la vida. Tengo bastante experiencia en diseño gráfico, montajes, restauración, carteleria, etc.
Dentro de mis aficiones tengo que decir que me fascina dibujar, la música, el cine, leer y, claro está, escribir (tengo algunos cuentos y relatos cortos)... ¡entre muchas otras cosas!