El movimiento de la moto no interfiere en la implantación del óvulo fecundado ni favorece el aborto; de hecho, algunas embarazadas viajan en moto cuando todavía no saben que lo están y su gestación se desarrolla con normalidad. Ahora bien, la moto no es un medio de transporte recomendable para las embarazadas, porque conducirla produce cierto estrés y porque, además, implica un riesgo de caídas, que pueden ser peligrosas. Estos inconvenientes se dan tanto al inicio del embarazo como más adelante.
Silvia Martínez
Educadora social, fotógrafa y amante de la vida. Tengo bastante experiencia en diseño gráfico, montajes, restauración, carteleria, etc.
Dentro de mis aficiones tengo que decir que me fascina dibujar, la música, el cine, leer y, claro está, escribir (tengo algunos cuentos y relatos cortos)... ¡entre muchas otras cosas!