1-LA DIETA ES IMPORTANTE
Sigue una dieta lo más variada posible, con mucha fruta y vegetales. Lo que debes evitar son, por ejemplo, el hígado (ya que contiene un elevado nivel de vitamina A que puede provocar problemas en el desarrollo cerebral y cardíaco de tu bebé), paté, huevos crudos (vigila la mayonesa casera), quesos tiernos y azules (que pueden contener bacterias perjudiciales) y carne y pescado crudos (que pueden contener toxoplasmosis, que causa malformaciones en el feto).
Aparte, puesto que tu bebé consume un tercio de tus reservas de hierro, debes comer mucha comida rica en hierro como la carne roja bien cocida, legumbres, pan integral y verduras.
2-NO TE OBSESIONES POR EL PESO
Tu médico te pesará en la primera visita y establecerá tu índice de masa corporal un número que relaciona tu peso antes del embarazo con tu altura.
La cantidad ideal de peso que debes aumentar depende de si estabas por encima o por depende de tu ideal antes de quedarte embarazada.
Si estabas en un peso de entre 9 y 14 Kg., que aumentarán si estabas por debajo del peso ideal y se reducirán si tenías algo de sobrepeso.
