El funcionamiento del intestino no es igual en todos los niños y, por lo tanto, el tipo de trastorno y la intensidad del dolor varía mucho de unos a otros
ESTREÑIMIENTO:Es la disminución en la frecuencia de la emisión de heces, que se vuelven secas y duras. También lo es cuando son frecuentes, pero dolorosas y acompañadas de llanto. Es un problema común y pasajero, pero hay que actuar porque puede cronificarse. Los bebés que toman pecho pueden pasar días sin hacer deposiciones sin tener estreñimiento.
- Incrementa la cantidad de verduras, en especial las más ricas en fibra (acelgas, judía verde, puerro) y frutas (plátano, manzana, naranja).
- Aumenta la cantidad de líquidos.
- Masajes su abdomen con movimientos circulares
- Siéntalo en una bañera con agua caliente para relajar su ano.
- En caso de emergencia usa un supositorio de glicerina, pero mucho cuidado no abuses de este método (solo en emergencias, y consultalo con tu médico).
DIARREA: Es una disminución de la consistencia de las heces, normalmente asociado a un aumento de su frecuencia. En los bebés es menos habitual que el estreñimiento y la mayoría están causadas por virus, entre los que destaca el rotavirus, que también ocasiona fiebre y signos catarrales.
- Ofrécele agua de arroz o de zanahoria.
- En la farmacia puedes comprar soluciones de rehidratación oral compuestas por agua, glucosa y sales minerales que evitan la deshidratación.
- Si los estás alimentando con leche materna, sigue dándole el pecho y además el suero que acepte.
VÓMITOS: No hay que confundirlos con las típicas regurgitaciones de después del amamantamiento. Pueden estar causados por un foco infeccioso, pero también por una sobrealimentación. La obsesión de algunas madres por ver a sus hijos bien nutridos les lleva a alimentar en exceso a sus bebés y éstos, por lógica, rechazan la comida o, una vez ingerida, reaccionan vomitándola.
- Evita darle agua sola a menos que el pediatra especifique la cantidad que debes darle.
- Ofrécele cantidades pequeñas pero frecuentes de soluciones orales electrolíticas de venta en farmacias.
- Si sólo toma leche materna y vomita, amamántalo de 5 a 10 minutos cada dos horas. Cuando lleve 8 horas sin vomitar, recupera las tomas normales.