Si observas que tu bebé tiene la piel demasiado sensible, el primer consejo que os dejo es que lo llevéis al médico consultéis vuestras dudas. De esta forma veremos si realmente padece algún tipo de enfermedad o bien simplemente tiene la piel un poco más sensible que otros bebés. Es posible que, sin querer, apliquemos algunas cremas u otros productos que estén dañando la piel de nuestro hijo sin que nos demos cuenta.
Por ello es bueno saber un poco más a cerca de las pieles sensibles en bebés y algunos consejos estupendos para aliviarles o eliminar cualquier rastro de picazón o ronchas que puedan salir. Sabiendo que la piel de los bebés de por sí es frágil y delicada, sobretodo en los primeros meses de vida, hemos de pensar que diariamente se exponen a todo tipo de agentes.
Por ello una serie de medidas no vendrán nada mal, sobretodo en sus primeros años de vida. Cuando bañes a tu bebé procura que sea en un ambiente propio para la época en la que esté si es verano que el agua no esté demasiado caliente o fría, pero si es invierno además nos ocuparemos de que la estancia esté más caliente y no pase frío. Los extremos de temperatura del agua no son buenas para la piel de tu pequeño.
Cuando bañes a tu bebé, utiliza siempre jabón con Ph neutro o incluso que contengan una base de glicerina. Siempre intenta evitar los jabones perfumados ya que pueden producir sequedad en la piel o picazón. Después del baño, procura eliminar la humedad que se le pueda quedar en los pliegues o entre los dedos de los pies.
Algo esencial, después del baño, sobretodo si tiene la piel delicada será utilizar algún tipo de emulsión o bien crema hidratante infantil para añadir a la piel. Es importante, al secar el cuerpo de tu hijo, no utilizar textiles fuertes o ásperos procura siempre tener una toalla de lo más suave para no dañar la piel del pequeño. Si los problemas persisten o se agravan siempre acude a un profesional.
foto: fashable