Durante la gestación, el bebé flota en el líquido amniótico y cambia de posición en múltiples ocasiones. Pero entre la 28a y la 32a semana, la falta de espacio le hacen buscar una postura más cómoda que, a su vez, es la mejor para atravesar el canal del parto: la cabeza encajada en el cuello del útero y el culete y las piernas cruzadas hacia las costillas de la madre.
La presentación de nalgas se da en el 4% de los nacimientos y esta proporción aumenta conforme el peso del bebé disminuye: representa el 15% de los nacimientos con bajo peso (menos de 2.500 g) y puede representar el 40% de los partos cuando el peso es menor.
Hay una serie de factores que pueden predisponer a una presentación de nalgas:
- Anomalías fetales: como hidrocefalia o anancefalia.
- Anomalías uterinas, como el útero bicorne.
- Gestaciones múltiples.
- Placenta previa o miomas.
El diagnóstico de una presentación de nalgas se realiza por examen abdominal y ecográfico y los protocolos de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia establecen que para una páciente que da a luz por primera vez el parto t¡ene que ser por cesárea. En el caso de una mujer que ya ha tenido más hjos, puede hacerse por vía vaginal.