¿Sabes cómo darle correctamente los medicamentos a tu hijo?. Los errores son peligrosos, así que pon a prueba estos consejos. Te ofrecemos una serie de situaciones que son las que se dan más a menudo.
1. Administrar medicamentos de adultos a los niños es correcto, siempre y cuando se reduzca la dosis a la mitad: FALSO
Administrar medicamentos, cuyo prospecto no explicita que estén indicados para ellos es peligroso. Hay que leer los prospectos y seguir sus instrucciones. Ante dudas es muy bueno consultar con algún especialista.
2. Los tratamientos con antibióticos deben seguirse hasta el final, aunque nos parezca que el niño ha mejorado: VERDADERO
Los tratamientos con antibióticos deben seguirse íntegramente para prevenir una recaída.
3. Una cucharadita de postre mide lo mismo que el dosificador de 5 ml que llevan los medicamentos.: FALSO
Pasa dosificar un medicamento correctamente debe emplearse la cazoleta o la jeringa medidoras incluidas en el envase. De otro modo, es fácil que te excedas o te quedes corta en el tratamiento para tu hijo.
4. La aspirina es segura para los niños y los bebés: FALSO
La aspirina ha sido asociada al síndrome de Reye, una afección fatal para el hígado, de modo que cualquier producto que la contenga debería evitarse hasta que el niño cumpla 16 años. Consúltalo.
5. Se pueden alternar las dosis de ibuprofeno con las de paracetamol: VERDADERO
Las dosis alternas de ibuprofeno y paracetamol son seguras, pero si está vomitando no debe dársele ibuprofeno porque puede irritarle el estómago.