Prevenir la incontinencia en el embarazo

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La presión del embarazo y del parto pueden dañar la musculatura del periné o suelo pélvico.

Te ofrecemos ciertos aspectos a tener en cuenta:

• El trastornos más frecuente que provoca un suelo pélvico debilitado es la incontinencia de orina y gases. Está provocada por un aumento de presión intraabdominal, como tos, estornudos, risa, cambio de posición, correr, saltar, etc., que provoca un descenso del suelo pélvico impidiendo realizar sus funciones. Se producen así escapes de orina.

• Además de las fugas de orina ante un esfuerzo abdominal, aunque sea leve, puede haber otros síntomas, como una excesiva frecuencia miccional y urgencia por acudir al baño con la vejiga llena.

• La prevención a lo largo de las diferentes etapas de la vida de la mujer es fundamental para evitar el debilitamiento del suelo pélvico y la incontinencia que ocasiona. Cualquier momento es bueno para comenzar la prevención o el tratamiento si el debilitamiento ya ha aparecido. La prevención se basa en el ejercicio continuado de la musculatura del suelo pélvico, para potenciar y flexibilizar el músculo.

• Hoy existe la rehabilitación o fisioterapia del suelo pélvico, como primera medida para tratar la incontinencia, prolapsos y disfunciones sexuales. Consiste en la realización de ejercicios del suelo pélvico, llamados de Kegel, para potenciar y reafirmar este músculo. El fisioterapeuta especializado usará técnicas manuales para estirar, fortalecer y flexibilizar la zona.

• También existen técnicas instrumentales, como el biofeedback y la electroestimulación funcional, ambos encaminados a fortalecer el suelo pélvico.

• Si ya han aparecido síntomas, es preciso comenzar el tratamiento lo antes posible y evitar que la patología progrese. Por otro lado, es fundamental la constancia de la paciente para obtener buenos resultados.

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