Este termómetro toma la temperatura por infrarrojos y su precio varía entre 60 y 90 euros dependiendo del modelo. Se llama Sensor No touch de Chicco y envía infrarrojos a la sien del enfermo y, después, calcula la temperatura.
En un principio pueden usarlo tanto adultos como niños, pero está pensado para los más pequeños. Una de las ventajas de este tipo de medición es que no tienes que molestar al bebé para tomarle la temperatura cuando está tranquilamente durmiendo. Así, puedes ver la evolución de su fiebre después de administrarle un antipirético, por ejemplo, sin tener que despertarle si duerme. Simplemente, poniendo el termómetro a una distancia máxima de 2.5 cm ya es capaz de analizar la temperatura del bebé.
Vía ¦MamisyBebes