Se ha comprobado que existe una relación directa entre la medicación para el asma y los daños dentales; como las caries y la erosión de los dientes fundamentalmente, sufridos por estos niños.
En los niños asmáticos se produce una menor producción de saliva (un 26% menos) y una disminución del Ph salival lo que favorece un mayor ataque ácido de las bacterias sobre los dientes causando las caries. Cuanto más tiempo esté tratándose un niño asmático con aerosoles u otro modo de administración y cuanto mayor sea la afectación del asma, más graves serán las caries.
Los niños asmáticos tratados con corticosteroides inhalados vía bucal, tomados en jarabe azucarado o en pastillas, tienen un 50% más de posibilidades de padecer caries que aquellos otros que no sufren esta patología y que no toman esta medicación. Estudios recientes revelan que la forma de administración en jarabe azucarado es la que más caries ocasiona.
La halitosis (mal aliento de boca), la xerostomia (disminución en la producción de saliva), la gingivitis (inflamación de las encías), la candidiasis (infección por hongos) y diferentes mal oclusiones son alteraciones que también se pueden producir en estos niños asmáticos.