Continuamos enumerándotelos 10 diferentes aspectos de la placenta que debes saber:
5. HAY PRUEBAS PARA SABER SI FUNCIONA
Al final de la vida de la placenta se forman unas calcificaciones, que se aprecian en la ecografía. Éstas no siempre quieren decir que la placenta funcione mal y que ya no nutra al bebé. La placenta puede seguir cumpliendo su misión, aunque se aprecien esas calcificaciones: si en diferentes ecografías se confirma que el feto crece adecuadamente y en una ecografía Doppler se comprueba que le llega un buen suministro sanguíneo a través del cordón umbilical y que su flujo sanguíneo es normal.
6. CON HIPERTENSIÓN, ENVEJECE ANTES:
Algunas enfermedades maternas pueden dificultar su misión. Por ejemplo, la hipertensión materna hace que envejezca antes, y el síndrome antifosfolipídico provoca que el organismo materno cree anticuerpos que “atacan” a la placenta. El ejercicio físico intenso también puede causar que la placenta deje de funcionar correctamente antes de tiempo.
7. ES UNA BARRERA PERO NO DE TOXICOS:
La placenta actúa como una barrera para bacterias, gérmenes, tóxicos….., pero eso no quiere decir que no puedan atravesarlo. Por ejemplo, algunas bacterias y gérmenes de gran tamaño no llegan al feto; sin embargo, algunas sustancias tóxicas, como el monóxido de carbono presente en el tabaco, pueden atravesarla fácilmente, ya que se trata de moléculas muy pequeñas. Lo mismo ocurre con la bacteria de la toxoplasmosis, que, sobre todo al principio del embarazo, puede sortear fácilmente la placenta.