Dicen que los bebés nacen con un pan bajo el brazo. Sin embargo, los que realmente vienen con una pléyade de cosas bajo el brazo, no sólo pan, son los familiares y amistades cuando hacen la primera visita al recién nacido. Una de las ideas más prácticas y mejor recibidas para llevar a los papás en estos primeros días del bebé en casa son las clásicas canastillas de bebé.
Hechas a medida, estandarizadas, compradas por internet… en la actualidad hay diversas opciones a la hora de elaborar o comprar estos originales regalos para bebés. ¿Quieres conocer todas las posibilidades? Sigue leyendo.
Ventajas de las canastillas para bebés
Estos regalos son, probablemente, lo más socorrido a la hora de celebrar la llegada a casa de un nuevo retoño. Y es que las canastillas para bebés tienen una serie de ventajas más que interesantes:
- Variedad en los regalos.
- Válido tanto para la mamá como para el bebé.
- Personalizable.
- Adaptable a distintos presupuestos.
Diferentes posibilidades
Una de las grandes ventajas a la hora de elegir una canastilla como regalo para un recién nacido es la accesibilidad. En efecto, en el mercado hay diferentes opciones a la hora de hacerse con un regalo de este tipo.
En Jovenbebé, web perteneciente a Letsfamily, se ofrece la posibilidad de disfrutar de una canastilla gratis con productos para la mamá y el pequeño o la pequeña de la casa. Sólo es necesario hacer clic en un banner y rellenar los datos que se solicitan.
Además de conseguir una canastilla gratis por internet, otra opción que existe es adaptar el producto a nuestros gustos o, más exactamente, a los de los recién estrenados papá y mamá. En efecto, actualmente ahora hay un buen número de establecimientos especializados en elaborar ‘tartas’ personalizadas en las que los pañales, toallitas, prendas y demás productos que conformarían una cesta estándar se combinan en formas caprichosas para crear diferentes obras (animales, cochecitos, tartas propiamente dichas…) adaptadas a la personalidad de los papás o al pequeño.
La personalización no se reduce a las formas, sino que también se pueden escoger los diferentes productos que componen la creación artístico-infantil. La clave, en definitiva, está en conocer un poquito a los destinatarios y dar rienda suelta a nuestra creatividad.