Tu hijo está a punto de nacer y tienes toda la logística preparada. Los primeros meses de vida de tu bebé tendrás que tener un cuidado exquisito con su piel. La dermatitis atópica es uno de los problemas de la piel más comunes. ¿Sabes cómo debes actuar?
La dermatitis puede deberse a una predisposición genética y puede ser una reacción del sistema inmunológico a una alergia, pero lo que muchos no saben es que también puede estar influenciada por factores emocionales (por ejemplo el estrés). Lo importante es que acudas a un médico si aparece cualquier indicio de una dermatitis atópica
En algunos casos puede aparecer junto con asma o alergia al polen, es decir con otras enfermedades alérgicas. A menudo la dermatitis se manifiesta ya durante los primeros años de vida del niño. A lo largo de la vida puede mejorar y en algunas personas incluso llega a desaparecer. Aún así, a menudo queda una hipersensibilidad de la piel al entrar en contacto con sustancias irritantes (por ejemplo sustancias aromáticas o colorantes) o en situaciones de estrés.
Te damos los siguientes consejos básicos para ayudar a reducir la gravedad y frecuencia de estos brotes en tu hijo.
En el baño
- Baña al niño en agua templada, no caliente.
- Limita el tiempo del niño en el baño a entre 5 y 10 minutos.
- Utiliza un limpiador sólo cuando sea necesario y asegúrate de que es suave y está libre de fragancias. No utilices espuma de baño.
- Después del baño, seca la piel del niño con suaves golpecitos sin friccionar.
- Si utilizas una medicina sobre la piel del niño, aplícala cuando su piel está casi seca y según las indicaciones del prospecto.
- Aplica hidratante después sobre la zona tratada y el resto de la piel del niño.
Elegir crema hidratante para la dermatitis
- Cuando elijas una hidratante, elige una crema densa o una loción.
- A algunos niños les sientan mejor los productos sin fragancia por lo que se puede optar por una vaselina, un producto barato sin fragancias que funciona bien en muchos niños.
- Resulta de ayuda probar con las muestras gratuitas de los diferentes productos para identificar la mejor hidratante para el niño.
Para aliviar el malestar propio de la dermatitis
- Para conseguir los mejores resultados, aplica la hidratante al menos dos veces al día. Esto evita la sequedad y fragilidad de la piel. Además, también puedes disminuir la necesidad de fármacos para los eccemas.
- Si el niño pasa por fases graves de picor y rascado, pregúntale al dermatólogo sobre la posibilidad de alguna terapia con vendajes húmedos oclusivos. Esto puede reducir la inflamación y disminuir el deseo de rascarse.
- Mantén las uñas del niño cortas y sin asperezas. Esto disminuye la probabilidad de que el rascado dañe la piel. Puedes ponerle en las manos guantes de algodón durante la noche para evitar que se rasque al dormir.
- Asegura niveles de temperatura y humedad agradables: evita las situaciones en las que el aire es extremadamente seco o en las que el niño pueda sudar y sobrecalentarse. Este es un desencadenante común del ciclo de picor-rascado.
Sobre la ropa
- Utiliza un detergente para lavar la ropa destinado a pieles sensibles siempre que sea posible. Los suavizantes con aromas o las sábanas que han pasado por la secadora pueden contribuir a la irritación.
- Añade a la lavadora o al agua de lavado sólo la cantidad recomendada de detergente.
- Emplea bastante agua para un aclarado adecuado o un programa extra de aclarado.
- Quita las etiquetas de las prendas porque pueden producir irritación derivada del roce con la piel.
- Lava siempre la ropa nueva antes de ponérsela al niño. Con ello lograrás eliminar el exceso de tintes y acabados de la ropa, que pueden resultar irritantes para la piel.