¿Crees que a tu hijo le cuesta memorizar? Quizás has observado que tiene dificultades para escribir o leer. Hay varios problemas específicos de aprendizaje que es necesario diagnosticar a tiempo para que no afecten gravemente al niño en las siguientes etapas de aprendizaje. ¿Quieres saber cómo actuar? ¡Aquí te mostramos cómo diagnosticarlo!
¿Qué es el Trastorno de aprendizaje?
Hay varios tipos de trastorno de aprendizaje, pero todos se caracterizan porque afectan a la capacidad de recibir, procesar, analizar y almacenar información. El Trastorno de aprendizaje causa problemas en diferentes ámbitos del aprendizaje, como la lectura, la escritura, el deletreo o los problemas matemáticos. Los tipos de trastornos más comunes son los siguientes:
Dislexia
Se caracteriza por una dificultad a la hora de leer. Es común que los niños confundan letras o números si padecen dislexia. La mayoría supera este problema antes de los siete años si se trata adecuadamente. A la larga puede causar problemas para expresarse de forma oral y escrita.
Disgrafía
Consiste principalmente en una incapacidad para escribir correctamente, debido a problemas con la coordinación motora o problemas para entender el espacio. Está relacionado con la dislexia.
Discalculia
Es la dificultad para resolver los cálculos matemáticos más simples.
Problemas en la memoria y en el procesamiento auditivo
Se caracteriza principalmente por una mayor dificultad para comprender y recordar palabras y sonidos. Esto ocurre porque la persona no almacena en su memoria de forma correcta o por un problema en el proceso auditivo central.
Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDHA)
Es uno de del problemas de aprendizaje más conocidos, y de los que más tratamiento necesita. Afecta entre un 4% a un 12% de los niños en etapa escolar. Los padres deben comprender y reconocer muy bien este trastorno para poder actuar adecuadamente, ya que no suele identificarse hasta los seis años de edad.
Diagnosticar los problemas específicos de aprendizaje
Si consideras que tu hijo sufre algún trastorno de aprendizaje, lo principal es acudir al especialista adecuado. Se suele acudir a un psicólogo, ya que los problemas específicos de aprendizaje tienen cierto componente neurológico, pero es sobre todo conductual y emocional. Es más, estos problemas son un círculo vicioso. Cuanto más bajo es el rendimiento académico del niño más baja es su autoestima, y viceversa.
Por tanto, el principal profesional al que acudir para que diagnostique a nuestro hijo es el psicólogo. Aun así, también es conveniente acudir a logopedas, psiquiatras y psicopedagogos, especialmente en casos como la dislexia o la disgrafía.
Por esta razón es bueno acudir a un centro especializado que integre a todos estos profesionales, lo que ahorra tiempo y hace que el niño se familiarice con el entorno. Cuanto más a gusto se sienta, más fácil será realizar el tratamiento adecuado.
Para realizar el diagnóstico, se realizan diferentes tipos de pruebas que analizan la evolución y el desarrollo del niño. Normalmente se utilizan cuestionarios, como algunos de los mostrados a continuación:
Wisc-IV
Mide el coeficiente intelectual del niño, de forma que se pueda diagnosticar si el problema reside en un factor neurológico o en uno emocional.
Prolec y Talec
Diagnostica si hay algún problema con la escritura o la lectura. Es el test perfecto para identificar problemas como la dislexia o la disgrafía.
Bender
Observa la maduración psicomotriz del niño es decir, si ha aprendido adecuadamente todo lo que supuestamente tiene que saber a su edad.
D2
Este elaborado test detecta el Trastorno por Déficit de Atención (TDAH).
Por lo tanto, si crees que tu hijo sufre problemas en el aprendizaje, lo mejor es acudir a un especialista cuanto antes. ¡Tu hijo estará en las mejores manos y podrás notar mejorías en poco tiempo!