En China, como era de esperar, se han puesto de moda las tripas de silicona para fingir un embarazo. El objetivo de las tripas de silicona (que están causando furor) es disfrutar de los privilegios que tienen las embarazadas aunque con algo bueno (no tienen efectos secundarios como nauseas, vómitos, etc). Este producto, cuesta entre 40 y 90 euros. En el anuncio televisivo que publicita este nuevo producto, dicen que gracias a esto, ya no necesitareis hacer cola en el autobús podrá tener asiento.
Pese a este éxito, la existencia de estas «tripitas» falsas había pasado desapercibida en China hasta esta semana, cuando una mujer de Pekín apareció en las noticias al ser descubierta «in fraganti» con uno de estos implantes en el metro de la capital china. La escusa que esta señora dio es que, a diario, sube en metro y hace varios desplazamientos largos. Le parecía que para ir cómoda, debía adquirir una de estas «panzas» para poder ir sentada. Parece ser que esta señora ha denunciado a la tienda que le se lo vendió por publicidad engañosa, ya que el vientre de silicona no logró dar el pego como prometían los vendedores.
En las webs chinas se puede encontrar gran variedad de estas barrigas, con distintos tamaños equivalentes a diferentes meses de gestación. Desde luego, otro tipo de función no tienen estas tripas, ya que sólo se puede «engañar» a la gente que no te conozca. Sin duda, estos chinos tienen mucha imaginación…
¿Utilizarías tú una tripa de silicona?