La natación es uno de los mejores deportes que se pueden practicar sin ningún inconveniente durante todo el embarazo. El hecho de flotar en el agua permite que tonifiques todos tus músculos sin que los fuerces violentamente, como lo hacen otras actividades más violentas. Además la natación también te va ayudar a la hora de mantener tu peso, ya que te hace que quemes esas cuantas calorías de más que tu bebé no necesita.
Está comprobado que la natación, aparte de tonificar los músculos, relaja, mejora la capacidad respiratoria y la posición de tus vértebras, disminuyendo los dolores de espalda tan frecuentes durante el embarazo. Además de ser una actividad física muy divertida que puedes realizar con tu pareja, el agua hará que pierdas la sensación de sobrepeso corporal, especialmente en el último trimestre del embarazo y te aliviará los dolores de espalda.
Respecto a los diferentes estilos de natación, se desaconseja totalmente el estilo mariposa. Se combinarán los diferentes tipos de nados, recurriendo a los más compatibles para cada persona según sus preferencias.
Deberemos tener en cuenta otros aspectos como:
• Realizar los movimientos de una manera suavizada.
• No llegar nunca al punto de agotamiento. Si se produce algún síntoma de vértigo o desmayo, se deberá parar inmediatamente la sesión.
• Realizar un trabajo aeróbico de intensidad baja.
• Realizar todos los desplazamientos sobre la coordinación con los ritmos respiratorios.
Otros ejercicios acuáticos como el salto o el buceo, quedarán prohibidos. El primero, por el riesgo de traumatismos en la gestante, y el segundo por la posibilidad de ocasionar traumatismos al bebé.
Los beneficios que nos reportan los diferentes estilos son:
Crawl: Con este estilo se alcanza una correcta ejercitación del ritmo respiratorio. Favorece la coordinación neuromuscular y potencia la musculatura del abdomen.
Espalda: Será beneficiosa sobre todo en lo relativo a problemas de la columna, frecuentes en el embarazo. Será conveniente realizar la doble brazada de espalda.
Braza: Es uno de los estilos más indicados durante el embarazo. En él conviene atender a que se realice con una decontracción muscular en la zona lumbar, donde se concentran tensiones involuntarias. Resulta positivo para ejercitar los músculos aductores-abductores.
Imagen: babyocean