Sentirse mareada es frecuente en el primer trimestre, cuando el volumen sanguíneo se duplica. Pero aunque resulten incómodos no afectan al bebé.
CONSEJOS:
1. Mantén estable tus niveles de azúcar en sangre. Realiza 5 comidas al día y no dejes pasar más de tres horas entre comida y comida.
2. Comprueba tus niveles de hierro. La anemia, una deficiencia en hierro, puede hacer que te sientas mareada y cansada. Si los análisis lo confirman, tu ginecólogo te prescribirá un suplemento de hierro.
3. Lleva en el bolso un plátano y una botella de agua para cuando sientas que te faltan las fuerzas.
4. Cuando sientas mareos, estimula la circulación de la sangre en el cerebro tumbándote con los pies en alto o descansa con la cabeza entre las rodillas. Si la ropa te aprieta en la cintura, restringirá la circulación, así que hazte ya con ropa premamá.