Está científicamente demostrado que al controlar los niveles de glucosa en sangre, antes del embarazo y durante el mismo, el riesgo para el feto es casi el mismo que en bebés nacidos de mujeres que padecen diabetes. Si quieres saber un poco más acerca del embarazo y la diabetes ¡echa un vistazo!
¿Qué es la diabetes?
La diabetes es una enfermedad, que se puede padecer antes del embarazo (las hay de diferentes tipos) o puede aparecer con el mismo (diabetes gestacional), en donde los niveles de glucosa, o azúcar en la sangre, están muy altos. Un nivel alto de glucosa durante el embarazo no es nada bueno para el bebé.
Embarazo y la diabetes: cuidarnos antes, durante y después del parto
Si padecemos esta enfermedad es esencial aprender cómo cuidar nuestra salud. Y no solo debemos hacer esto durante el embarazo sino antes y después del mismo.
Las mujeres que padecemos diabetes, antes de quedar embarazada, es el mejor momento para controlar el nivel de glucosa en sangre y más cuando deseamos quedarnos en estado.
El también llamado nivel de azúcar en sangre, es mejor cuidarlo desde antes de quedar embarazada. Los niveles altos de glucosa en sangre pueden llegar a ser muy perjudiciales para el feto bebé durante las primeras semanas de embarazo, incluso antes de saber que estamos embarazadas.
¿Cómo aprender a cuidarnos mejor?
Debemos seguir unas pautas concretas y lo mejor es asesorarse e informarse correctamente, con profesionales que nos ayuden a ello. El médico o el nutricionista debe organizar una planificación de las comidas que debemos hacer, del ejercicio que debemos practicar y los medicamentos que debemos tomar.
Siguiendo todo esto debemos alcanzar los objetivos de nivel de azúcar en sangre que nos hemos planteado. De esta manera obtenemos un buen plan de salud para mantener cuidada la diabetes.
El embarazo causa muchos cambios en el cuerpo de la mujer, por lo que ésta podría necesitar cambiar la forma en la que habitualmente maneja su diabetes. Aunque la madre haya tenido diabetes durante mucho tiempo, puede que sea conveniente cambiar sus hábitos de comida, la rutina física diaria, medicamentos u otras costumbres.
El embarazo y la diabetes gestacional. ¿Qué es?
La diabetes gestacional es un trastorno específico del embarazo, que aparece cuando el cuerpo de la mujer no gestiona de forma correcta la hormona insulina. ¿Te han detectado diabetes gestacional?
La diabetes gestacional no provoca síntomas o estos son bastante leves. Por este motivo se realiza, de forma habitual, un test a todas las embarazadas entre la semana 24 y 28 de embarazo. Es una manera de saber si padecen o no esta no enfermedad sino afección.
El embarazo necesariamente implica un aumento de actividad en el metabolismo de la madre. Para mantener la glucosa en los niveles correctos, el cuerpo necesita producir más insulina. Cuando la cantidad adicional que produce no es suficiente, la glucosa en sangre se eleva a niveles fuera de los valores normales.
El problema ocurre cuando el organismo femenino fabrica insulina deficiente o no la aprovecha de manera correcta. Debido a este desajuste en el metabolismo la glucosa se acumula en la sangre.
La insulina es una hormona que se fabrica en el páncreas y esta es la responsable de convertir el azúcar, que proviene de los alimentos y que circula por la sangre, en energía.
Embarazo y la diabetes: como afecta a la madre y al feto
Los niveles tan altos de glucosa en sangre, antes del embarazo y durante este, afectan tanto a la madre como al feto. De esta manera pueden aparecer enfermedades cardíacas, problemas de vista, enfermedades en los riñones.
Padecer diabetes aumenta las probabilidades de que el bebé al nacer tenga exceso de peso, problemas de glucosa demasiado baja o que nazca de forma prematura. También pueden desarrollarse problemas respiratorios, entre otros.
Si tienes diabetes y no te la cuidas el bebé tiene alto riesgo de padecer defectos de nacimiento. Pero no solo esto, sino que podemos tener un aborto espontáneo y perder al feto dentro de las primeras 20 semanas o, en el peor de los casos, la conservación del feto inerte dentro del útero después de estas 20 semanas.
Es esencial saber y recordar que si eres tienes diabetes la glucosa que hay en tu sangre va a pasar a tu bebé. De esta manera durante el embarazo el feto tendrá demasiada azúcar en la sangre. En este sentido, después del parto, puede que el nivel de azúcar descienda drásticamente en el bebé, siendo demasiado bajo.
Embarazo y la diabetes: otras afecciones
Además de todo lo que ya hemos visto, padecer diabetes también aumenta la posibilidad de desarrollar otras afecciones. Una de ellas es la preeclampsia, la cual es una presión arterial muy alta y un exceso de proteínas en la orina. Esto puede pasa en la segunda mitad del embarazo.
Esta afección es potencialmente mortal para la madre y el feto y la única solución, cuando se desarrolla muy tarde, es realizar una cesárea o parto quirúrgico de forma prematura. En cambio, si se desarrolla en etapas del embarazo más temprana podemos pasar esta afección con mucho reposo en casa y tomando medicamentos.
Otra afección o enfermedad es la depresión adquirida por la madre. Si padece esta enfermedad puede sentirse demasiado mal como para cuidar de su diabetes. De esta manera se hace imprescindible que acuda a un profesional para que lo ataje. Es muy importante acudir al médico para que nos remita al profesional más cualificado.
Si durante el embarazo o después de este te sientes con ansiedad, triste o incapaz de lidiar con los problemas del día a día y con los cambios que estás enfrentando, consulta a tu médico inmediatamente. Esta enfermedad es tratable pero no debemos dejarla seguir.
¿Qué te parece este artículo sobre el embarazo y la diabetes? ¿Quieres conocer el embarazo y otras enfermedades? ¿Quieres saber cuál es la alimentación más adecuada para una mujer embarazada?